Blog de la asignatura Crítica Teatral 2

impartida por Juan Antonio Vizcaíno


jueves, 31 de diciembre de 2009

"Lorca sobrevalorado

El viernes 18 de diciembre, en la RESAD de Madrid (Real Escuela Superior de Arte Dramático) va a tener lugar la primera muestra de escenas de los alumnos del segundo curso de dirección de escena. "Lorca ha estado durante mucho tiempo sobrevalorado", afirma rotundamente uno de los alumnos de este curso, la joven actriz y profesora de teatro para niños y adolescentes Ana Garrido, que ha dirigido una escena de uno de los grandes clásicos del s. XX, la tragedia "Bodas de sangre", de Gª Lorca.


"Para mí ha sido un gran reto montar este texto, porque hasta ahora sólo había trabajado comedia y farsa", declara Garrido, que ha estado en repetidas ocasiones bajo las órdenes de diversos directores en montajes sobre obras de Enrique Jardiel Poncela y de Miguel Mihura.


"Mi primer cometido con las actrices fue, en primer lugar, quitarles toda idea preconcebida de sus personajes para a continuación pasar a un estudio pormenorizado del texto", continúa Garrido, quien afirma haber ensayado con sus compañeras a última hora pues por "por sus trabajos y el mío, ha sido bastante difícil encontrar un momento del día para vernos".


A pesar de ello, la joven futura directora está satisfecha con su propuesta, que aunque considera "arriesgada", también advierte que "se ajusta bastante al texto del autor y las intenciones que, según creemos, éste quiso dar a sus personajes y a esta escena concreta dentro de la obra".

La muestra dará comienzo a las 12 del mediodía en un aula de la planta baja, y el trabajo de Garrido se podrá ver el primero en el orden del día.


"Trabajar con ellas ha sido maravilloso, aunque todavía tengo mucho por aprender", termina diciendo Garrido antes de empezar a maquillar a una de sus actrices poco antes del ensayo general.


por nico guau


Nico Guau

Nico Guau es de raza dálmata y nació en 1990 en un pueblo de Badajoz. Asistió a la escuela pública hasta que a los 6 años fue adoptado por una familia de Badajoz capital. Allí aprendió a escribir y a leer, pero al poco tiempo viajó a Madrid, abandonando Extremadura. Una joven le acogió en su casa y fue entonces que empezó a leer novela y teatro. A los pocos años se independizó y empezó a escribir relatos. En el año 2003 ganó el Premio Jóvenes Creadores del Ayuntamiento de Madrid por el relato El perro y el culo, y al año siguiente creó una publicación llamada La hora de nico, en la que siguen apareciendo periódicamente sus escritos. Actualmente vive en Madrid, escribe críticas de teatro en internet y colabora con frecuencia en Radio Nacional de España.

Leopoldo Mª Panero


LEOPOLDO MARÍA PANERO, (Madrid, 1948), casi último poeta, pues su hermano Juan Luis aún vive, de una interminable saga de literatos, puede ser considerado como el más genial de los surgidos en España en las últimas décadas. Su infancia estuvo marcada por un cierto régimen dictatorial instaurado en su propia familia poco después de acabar la guerra, lo que le llevó a oponerse a su padre, Leopoldo, y a ejercer una activa militancia en el partido comunista, consiguiendo la primera estancia en prisión de una larga lista. Posteriormente estudió Filosofía y Letras en la Universidad Complutense de Madrid y Filología Francesa en la Universidad Central de Barcelona. En los primeros años de la década de los 70 tuvo sus primeras experiencias con la droga, (dedicaría un poemario a la heroína en 1992), sus primeros problemas de alcoholismo,  y algunos intentos de suicidio, además de su primer internamiento en un centro psiquiátrico. Posteriormente se le diagnostica esquizofrenia, y desde finales de los 80 y por voluntad propia, recala en diversos centros psiquiátricos de la península, hasta que 10 años más tarde se instala definitivamente uno situado en Las Palmas de Gran Canaria, donde reside actualmente.

 

Dejando aparte su menos conocida faceta de narrador, ensayista y traductor, además de sus colaboraciones en discos y en películas documentales sobre la vida de su familia, la labor a la que dedica casi todo su tiempo desde su internamiento psiquiátrico, es a su poesía. Encontramos un gran volumen de obra publicada, desde su primer poemario, Por el camino de Swann (1968), impreso por el empeño de su mentor Pere Gimferrer, hasta su más reciente La tempesta di mare, en colaboración con Félix J. Caballero. Mención especial merecen Así se fundó Carnaby Street (1970) y En teoría (1973). El reconocimiento más importante a su carrera como poeta le llegó en el año 2003 al ser galardonada con el Premio Estaño de Literatura la antología Poesía Completa 1970 –2000, en edición de Túa Blesa, que la editorial Visor había publicado 2 años antes. Ante la pregunta de un periodista sobre si su poesía era automática, esta polifacética "reencarnación de Baudelaire", como él mismo se proclama, respondió, entre cigarrillo y cigarrillo: "No me prohíbo nada, salvo cagar en la silla", lo que nos da una idea del material que podemos encontrar hojeando las cientos y cientos de páginas que nos ha legado (y sigue legando) este "poeta maldito".

sábado, 19 de diciembre de 2009

ANTECRÍTICA de Ignatius Reilly. Corrección

“Nunca antes me había interesado por la metodología naturalista”, afirma Germán Collado, alumno de segundo curso de Dirección de Escena de la RESAD (Real Escuela de Arte Dramático), lugar en dónde el próximo viernes 18 tendrá lugar la muestra de los trabajos de la especialidad de Dirección. Germán Collado presentará la escena final del acto primero de El Abanico de Lady Windermere, de Oscar Wilde. El joven estudiante de dirección considera interesante este texto porque, según sus palabras, “El qué dirán influye hasta tal punto en nuestras vidas que, a menudo, se convierte en más real que la verdad misma”.

El resultado al trabajar una metodología naturalista, ajena a la formación actoral de Germán Collado – basada en encontrar los personajes de fuera a dentro, es decir, construir el cuerpo para, de ahí, obtener la psicología -, ha sido muy interesante puesto que ahora el joven director tiene muchas más herramientas que enriquecen su escena.

En su proceso se ha elaborado una partitura de movimientos a partir de los sucesos iniciales de la escena para después hacer una reelaboración de dicha partitura haciendo crecer los sucesos iniciales; prosiguiendo con esta dinámica en los restantes ensayos una y otra vez con la finalidad de enriquecer los matices de la escena.

Germán Collado ha sido fiel al marco histórico de la obra, ambientando el montaje de la escena en la época victoriana, dentro del marco de la aristocracia del siglo diecinueve. Ha trabajado con dos alumnos de interpretación textual de la escuela – Cristina Salmerón y Jota Rodríguez – desde la metodología de Stanislavski/Layton. Todas las muestras se han realizado partiendo de la misma metodología.

Germán Collado afirma haber aprendido mucho en las 18 horas que ha trabajado con sus actores (Cristina Salmerón y Jota Rodríguez). “Cristina me ha enseñado mucho porque conocía muy bien esta técnica”.

A pesar del bagaje desigual existente entre sus dos actores, ha merecido la pena porque podemos asistir a un verdadero trabajo de equipo en el que director y actores han puesto en común sus conocimientos para, desde el respeto mutuo, poder sacar adelante este proyecto y enriquecer un espectáculo lleno de matices.